Roscosmos aplaza misión de rescate a la Estación Espacial Internacional

Se pospone el lanzamiento de la nave de rescate Soyuz MS-23

La Estación Espacial Internacional estaba en alerta desde hace semanas debido a diversas situaciones anómalas que se habían presentado en las naves espaciales. Por eso, la agencia espacial rusa, Roscosmos, había planeado enviar la nave Soyuz MS-23 sin tripulantes en misión de rescate hacia la estación. Sin embargo, debido a una serie de problemas, esta misión tuvo que ser aplazada hasta marzo.

Foto Roscosmos: evidencias externas en la nave Soyuz MS-22 de que pudo haber un impacto 

El jefe de Roscosmos, Yury Borisov, explicó que la decisión se debía a las situaciones anómalas que se habían producido en la Estación Espacial Internacional en los últimos meses, como la fuga de refrigerante del sistema de gestión térmica de las naves Soyuz MS-22 y Progress MS-21. Una comisión estaba trabajando en el caso Progress MS-21 y hasta que se determinara la causa de la situación anómala, se decidió aplazar el lanzamiento de la Soyuz MS-23 en modo no tripulado.

El problema de la Estación Espacial Internacional parecía no tener fin, ya que se había producido una despresurización del circuito externo del radiador del sistema de gestión térmica de la nave espacial Soyuz MS-22 el pasado 15 de diciembre. Los expertos habían concluido que la nave dañada debía descender a la Tierra sin tripulación y se había decidido proceder al lanzamiento de la Soyuz MS-23 el 20 de febrero en modo no tripulado para que fuese ocupada en vuelo de retorno por los tripulantes asignados a la Soyuz MS-22. Pero ahora, esta misión también quedaba aplazada hasta marzo.

Además, se descubrió una brecha en el fuselaje exterior de la Soyuz MS-22, lo que demostraba que los daños eran externos. Roscosmos seguía investigando la causa de la despresurización del sistema de gestión térmica de la nave espacial de carga Progress MS-21 que se produjo el 11 de febrero en la Estación Espacial Internacional. Estaba previsto que el manipulador remoto del segmento estadounidense inspeccionara la posible localización de los daños en la superficie exterior de la nave.

La situación en la Estación Espacial Internacional era preocupante, pero los expertos estaban trabajando duro para resolver los problemas. Esperaban que las misiones de rescate pudieran llevarse a cabo con éxito una vez que se determinara la causa de las situaciones anómalas y se tomaran las medidas necesarias para evitar que se repitieran en el futuro.